¿Propósitos saludables?
Te compartimos estrategias que te ayudarán a desarrollar más que propósitos, hábitos saludables.
Cada que inicia un año, muchas personas suelen plantearse propósitos relacionados con cuidarse más y uno de los más conocido es el de ‘bajar de peso’. ¿Lo has hecho?, ¿comienzas a ejercitarte y a comer “saludablemente”, pero te das por vencido solo unas semanas después?
A lo mejor no necesitas bajar de peso, pero has prometido dejar de lado los malos hábitos alimenticios; sin embargo, ante el primer antojo vuelves a tus hermosas costumbres al poco tiempo.
Este tipo de propósitos son muy prometedores, pero ¿qué es lo que hace que el cambio sea tan difícil? Al parecer suelen convertirse en un fracaso cuando la motivación disminuye o desaparece, pero la realidad es que los humanos somos criaturas de hábitos.
Necesitamos energía y la intención para que nuestros cerebros se detengan y piensen en actuar diferente. Por ello debes considerar y atender los comportamientos y habilidades arraigadas a tu persona y ver qué debes cambiar.
A continuación encuentras unas recomendaciones que te ayudarán a avanzar en cambios reales:
• Olvídate del todo o nada. Cuando tienes grandes ambiciones puedes sentirte motivado al principio, pero el querer cambiar demasiado a la vez te puede llevar a la decepción, es decir, comienza poco a poco. Por ejemplo, en lugar de un régimen alimenticio estricto, comienza a tomar decisiones más saludables en una comida, tal vez puedes decirle adiós a los refrescos y hola al agua.
• Busca y explora oportunidades para comenzar tus cambios. Por ejemplo, camina para llegar a los transportes públicos; sube y baja las escaleras fijas (sí, despídete de las escaleras eléctricas y los elevadores, por lo menos algunos pisos), comienza a trasladarte a otros lugares en bicicleta.
• La paciencia es básica. Pese a que la gente está consciente de que desarrollar un hábito saludable requiere de tiempo, muchos se decepcionan porque quieren ver cambios de la noche a la mañana y, al no verlos reflejados rápidamente, prefieren tirar la toalla. Sin embargo, es importante que hagas un seguimiento de tus avances para que puedas realizar una reflexión sobre los mismos.
¡Ten confianza en ti, con el tiempo verás reflejados los resultados en cómo te sientes!
Aunque algunos cambios son difíciles, al repetir constantemente tus nuevos hábitos logras que cada vez sea más fácil que sean parte de tu vida y no permitirás que se vayan nunca más.
Consulta a tu médico.
Fuente consultada:
Mayoclinic